El reto
Los valores organizacionales de Zambon se pusieron a prueba durante la pandemia, cuando sus programas de aprendizaje y desarrollo existentes se sumieron en el caos por la necesidad de cambiar rápidamente de clases presenciales a aprendizaje online para el personal. De acuerdo con su largo historial de innovación, Zambon necesitaba el apoyo de un proveedor ágil y flexible para personalizar sus programas online y adaptarlos a sus necesidades organizacionales específicas.
Algunos de los programas existentes eran incompatibles con un entorno puramente digital y dificultaban la transición online, lo que significaba perder valiosos activos de conocimiento, algo que Zambon quería evitar. Otro requisito crucial para la empresa era garantizar que la formación online siguiera siendo lo más accesible posible para todos los alumnos para que pudieran beneficiarse del cambio.