Aurea Benito: liderazgo en tiempos de IA (parte 1)

Aurea Benito es licenciada en psicologia por la Universitat de Barcelona y Master en HR Management por la EADA Business School, su carrera en el campo de los Recursos Humanos arrancó en 1988 como técnico de selección y, a día de hoy, trabaja desde hace más de 16 años como Corporate People Director en ISDIN.

En Hult EF hemos hablado con ella y le preguntamos sobre el impacto de la inteligencia artificial en el liderazgo.

Aurea, ¿qué desafíos enfrentan las empresas para abordar una implementación exitosa de la IA?

La IA ha generado grandes expectativas en las empresas, que buscan ser más competitivas incorporando tecnologías como CRM, machine learning y chatbots. Sin embargo, estas expectativas también pueden generar ansiedad debido a la dificultad de diseñar modelos de negocio rentables y el temor a la sustitución por máquinas.

Una buena implementación de la IA requiere poner a las personas primero y luego la tecnología, junto con un diseño ético que garantice la privacidad y la seguridad. La IA y la ética deben ir de la mano para evitar la discriminación y las desigualdades. Además, en un mundo donde la paciencia es fundamental, los beneficios reales de la IA se verán a largo plazo. La tecnología es mágica, pero no hay fórmulas mágicas para implementarla con éxito, sino toma de “con-ciencia”, ética y trabajo duro.

¿Qué habilidades humanas no podrán ser replicadas completamente por la IA?

A pesar de que la IA ha creado obras de arte, aún no puede soñar ni imaginar lo que no existe. Utilizarla como herramienta creativa plantea desafíos, especialmente en la evaluación de nuevas ideas. La IA puede ser el mejor “pincel” del mundo, si bien siempre necesitará una mano que le de intención y emoción.

Ahora bien, una pregunta más interesante a plantear es ¿cómo podemos utilizar la IA como una herramienta de pensamiento y de creación que nos haga salirnos de nuestras propias fronteras y sensibilidades para ir más allá?

El pensamiento crítico es esencial en la era de la información excesiva y las Fake News, ya que "creer" es más fácil que "pensar". La "infoxicación" por exceso de información nos hace vulnerables, especialmente en un contexto de Deepfakes y IA. La falta de pensamiento crítico se agrava debido a los algoritmos de personalización, que limitan nuestra exposición a diferentes perspectivas y refuerzan nuestras creencias, independientemente de su veracidad.

Es crucial evaluar la calidad de la información y garantizar el uso ético de la IA. Cierto es que la IA está evolucionando cada vez más en su capacidad de reconocer las emociones humanas e incluso de replicarlas, puede hacernos sentir pero es incapaz de sentir. Está en nuestra naturaleza humanizarlo todo.

La IA está revolucionando la toma de decisiones al proporcionar análisis de datos precisos y en tiempo real, sin embargo, existe el peligro de perder la perspectiva o pensar que la IA siempre tiene que ser la respuesta. ¿Qué otros desafíos y riesgos se encuentran asociados con la implementación de sistemas de IA en la toma de decisiones y cómo se pueden mitigar?

La IA supera a los seres humanos en el procesamiento de datos, es mucho más rápida y es capaz de identificar patrones y tendencias, lo que proporciona una comprensión más profunda de la información relevante; además, al usar modelos predictivos, realiza pronósticos precisos sobre el futuro. Sin embargo, aunque los algoritmos y el procesamiento masivo de datos ofrezcan unos resultados objetivos muy valiosos para la toma de decisiones, la implementación de la IA en el ámbito laboral plantea preguntas éticas y dilemas morales que no podemos soslayar, como la potencial discriminación, la falta de privacidad o los ataques de ciberseguridad.

El liderazgo debe ser sostenible, inclusivo y ético y debemos velar por que los sistemas de IA no perpetúen o amplifiquen los prejuicios sociales debido al uso de datos sesgados o una mala programación de un algoritmo. Pero tomar conciencia es tomar ventaja y si tenemos presentes los riesgos, podemos usar la IA para ser más empleables y competir mejor en el mercado laboral.

La gestión de datos y la privacidad se vuelven áreas críticas para RRHH a medida que las interacciones con IA generan grandes cantidades de información personal. ¿Cómo asegura RRHH el cumplimiento de las regulaciones de privacidad y que las decisiones impulsadas por la IA sean justas y equitativas?

En el ámbito de Recursos Humanos, la privacidad de datos es esencial para cumplir con la legislación y proteger los derechos individuales. La presencia de un Delegado de protección de datos (DPO) es crucial para supervisar este cumplimiento. Además, RRHH debe informar claramente sobre cómo se manejarán los datos personales, y las personas tienen el derecho de solicitar la eliminación o una copia de sus datos almacenados.

Paralelamente, es vital garantizar la equidad en las decisiones impulsadas por la Inteligencia Artificial (IA) y Human Analytics. A pesar de la capacidad de procesamiento de datos de la IA, carece de empatía y contexto ético y cultural. Aunque no puede discriminar intencionalmente, los datos utilizados para tomar decisiones laborales históricamente sesgadas pueden perpetuar prejuicios. Los algoritmos bien programados pueden proporcionar información objetiva, pero es fundamental ejercer el pensamiento crítico para evitar riesgos psicosociales.

En última instancia, el equilibrio entre la tecnología y la ética debe ser mantenido en RRHH para asegurar un ambiente laboral justo y respetuoso para todos.

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(Puedes continuar leyendo la segunda parte de la entrevista a Aurea Benito aquí)