En tiempos donde aún continuamos en la lucha contra la COVID-19, el compromiso de Danone se hace más fuerte y cobra mayor sentido que nunca: “la seguridad de los empleados y aportar salud al mayor número de personas posible”.
Sara Castro, Directora de Recursos humanos del grupo francés de alimentación Danone en España, comparte con EF en esta estrevista una reflexión sobre la manera de trabajar a posteriori de la aplicación del Estado de Alarma y cómo continuar con el mismo compromiso, dedicación y trabajo durante la crisis sanitaria en la que aún seguimos inmersos.
Con un tono optimista y esperanzador, Sara nos muestra las claves para enmarcar el trabajo en un contexto digital y así, poder conseguir una óptima gestión empresarial, siempre preservando la seguridad de los empleados.
Sara Castro diplomada del Master en Business Administration and Management por el ESADE inició su trayectoria en Danone en el año 2007 como Organizational Development and HR Business Partner. Con casi 20 años de experiencia, ha ocupado puestos sobre estudio y desarrollo de talento a nivel nacional e internacional en distintas divisiones la compañía. Desde hace más de un año desempeña el puesto de Directora de Recursos Humanos del Sur de Europa que comprende España, Portugal, Italia y Grecia.
¿Cómo ha vivido Sara Castro la situación desde el inicio de la crisis sanitaria?
Ha sido un año muy intenso tanto en lo personal como en lo profesional. Como muchas personas, conciliar la vida profesional en un momento excepcional como el que vivimos en marzo con la vida familiar, no fue sencillo. Pero a través de la colaboración y la cooperación estamos saliendo adelante. Y esta es una reflexión que vale tanto para la familia como para la empresa.
En el escenario VUCA actual, una plantilla comprometida, que se esfuerce y dé todo lo mejor de sí cada día, tiene un valor incalculable ¿cómo han respondido los trabajadores de Danone al desafío actual?
Precisamente en el contexto actual, marcado por el impacto del COVID, el esfuerzo y dedicación de todos ellos nos ha permitido tener una gran capacidad de adaptación y reacción. Algo que ha sido capital teniendo en cuenta que el sector de la alimentación fue declarado un sector económico esencial durante la situación de emergencia.
Para Danone, es clave la seguridad de los empleados y que se sientan completos y felices para poder hacer realidad su propósito y conectar con el de la compañía: aportar salud al mayor número de personas posible.
En España, con el propósito de reconocer la labor de los 911 empleados de la compañía que continuaron yendo a sus puestos de trabajo en periodo de confinamiento, anunciamos una prima extraordinaria de 500€ brutos. Además de la prima extraordinaria, hemos garantizado el empleo y el 100% del salario a nuestros cerca de 2.000 trabajadores hasta el mes de junio. Contamos con un comité de seguimiento interno para la monitorización y control del COVID-19 para adoptar las medidas necesarias para garantizar la seguridad de los empleados. Para ello hemos aprobado recientemente la política de flexibilidad para teletrabajar hasta finales de año.
¿Qué iniciativa adoptada en RRHH frente a la crisis del COVID-19 ha tenido mejor acogida entre sus empleados?
La prioridad para Danone durante la crisis sanitaria era garantizar la seguridad de los empleados y de su entorno. Por lo tanto, cada una de las medidas que hemos adoptado han tenido un objetivo concreto para poder brindar de manera integral esa seguridad a nuestros empleados.
Algunos ejemplos:
En todas nuestras instalaciones implementamos diferentes actuaciones para garantizar el máximo grado de higiene personal y limpieza.
Impulsamos el teletrabajo en todos aquellos casos en los que era posible, para evitar riesgos y posibles contagios.
Apoyo psicológico durante la COVID-19.
Video llamada médica para todos los empleados.
Programa de apoyo durante el confinamiento total: gympass, actividades para niños, etc.
Voluntariado social.
¿Cómo han preparado el proceso de desescalada en la empresa para garantizar la seguridad de los empleados? ¿Cómo están gestionando la incertidumbre de sus trabajadores?
Queremos asegurar que esa vuelta paulatina a la “next normal” se lleve a cabo con las máximas garantías. La clave en este proceso ha sido escuchar a los empleados, entender y empatizar con sus necesidades individuales, ofrecer flexibilidad y opciones adecuadas a cada persona. Y seguir las recomendaciones de las autoridades.
Una de las herramientas clave, además de encuestas semanales y específicas y las reuniones de equipo, han sido las Global Pulse Surveys: estudios de opinión que ya realizábamos cada 3 semanas a nivel grupo. Estas encuestas regulares permiten hacer seguimiento de la satisfacción de los empleados, conocer sus valoraciones y confirmar que hay consenso en cuanto a los planes, misión y metodologías de trabajo.
La realidad que conocíamos antes de esta pandemia va a tardar tiempo en recuperarse. Las reuniones serán reducidas, no nos daremos la mano; se restringirán los viajes y asistencia a congresos, foros y otros eventos… Pero estamos siendo capaces de afrontar esta situación y aprender lecciones que nos hagan salir reforzados de la misma.
Las compañías han evolucionado rápidamente hacia la digitalización en sus relaciones internas y con los agentes externos, ¿cómo afecta esta digitalización a la formación corporativa en su empresa?
Esta crisis nos ha permitido poner en evidencia procesos que ya teníamos adoptados e implementar mejoras en algunos otros para conseguir estar cerca de nuestros empleados pero también de nuestros clientes, partners y proveedores. Parte importante de estos procesos fue la digitalización, hemos apoyado e impulsado el teletrabajo en los casos en que era posible. Nuestra infraestructura de IT nos ha permitido seguir trabajando en casa sin ningún perjuicio para la compañía a través de móviles, laptops, conexiones seguras, webex…
Además del abanico de formaciones que tienen disponibles nuestros empleados a través de plataformas digitales como Campux X, estamos desarrollando una APP centrada en el knowledge sharing para compartir ideas innovadoras, llamada DanMatch. La innovación está en nuestro ADN y por ello, hemos buscado alternativas adaptadas a las circunstancias actuales con el fin de que nuestros empleados continúen su formación.
¿Cómo definirías el nuevo panorama o la “nueva normalidad” post Covid-19 en las empresas?
Vemos la “nueva normalidad”, que preferimos llamar en Danone “next normal”, como un reto. Las últimas semanas han sido una oportunidad para evaluar nuestros procesos en todos los ámbitos y mejorarlos. Para la compañía, lo más importante ahora es seguir garantizando la seguridad de nuestros empleados y de su entorno al igual que proporcionarles la información oportuna sobre las medidas que hemos puesto en marcha para brindarles la confianza que necesitan en el regreso a las oficinas.
¿A quién/es te gustaría agradecer su apoyo durante estos meses?
Durante los últimos meses hemos emprendido proyectos con las diferentes áreas de la compañía de manera transversal como por ejemplo el programa de acción social Alimentar por Amor, que pusimos en marcha para hacer frente a la situación generada por la COVID-19. Alimentar por Amor fue nuestra manera de responder al impacto del COVID-19 en nuestros empleados, colaboradores y colectivos más vulnerables. El compromiso y coordinación de toda la organización fue la clave en el éxito de este programa, que tiene continuidad desde el mes de septiembre con la iniciativa Una Gran Familia, impulsada con la Federación de Bancos de Alimentos (FESBAL) y Cruz Roja. El objetivo de que un millón de niños y niñas que lo necesitan puedan acceder a una alimentación saludable. Podéis consultar www.unagranfamilia.es para más información.
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